Durante años, trabajar el SEO era suficiente para ganar visibilidad en Google. Optimizar títulos, conseguir enlaces y publicar contenido de calidad bastaba para atraer visitas. Pero eso ya no alcanza.
Hoy, estamos en una nueva etapa: la IA no solo asiste en las búsquedas, las reemplaza. Y eso cambia todo.
¿Qué está pasando?
Las personas ya no buscan de la misma forma. En lugar de escribir “mejores plataformas para conseguir enlaces”, muchas simplemente preguntan a ChatGPT o a los resúmenes automáticos de Google (llamados AI Overviews).
Estas respuestas se generan sin necesidad de entrar a ninguna página. La IA analiza miles de sitios y ofrece un resumen directo. ¿El problema? Solo unas pocas marcas o fuentes son citadas. Y el resto… desaparece.
Nace un nuevo concepto: Authority IA
En este nuevo escenario, no basta con posicionarse bien. Ahora necesitás que la inteligencia artificial te reconozca como una fuente confiable.
A eso se le llama Authority IA: es el nivel de visibilidad que una marca, blog o profesional tiene dentro del «cerebro» de la IA.
Ya no se trata solo de tener buenas prácticas SEO. Se trata de formar parte de las respuestas que dan los asistentes como ChatGPT, Gemini o Copilot.
¿Cómo lograrlo?
Si querés seguir siendo visible en este nuevo entorno, tenés que adaptar tu estrategia. Acá te dejo una hoja de ruta clara:
1. Publicá en sitios con autoridad
No alcanza con publicar solo en tu blog. Si querés que te reconozcan como referente, necesitás aparecer en medios que ya tienen peso. Las IA toman sus datos de fuentes validadas.
2. Especializate en un tema
Cuanto más claro sea tu enfoque, más fácil será que la IA entienda sobre qué temas sos confiable. Evitá dispersarte con contenidos que no están en tu línea.
3. Mostrá quién sos
Tener un autor identificado, con presencia en LinkedIn, en otras webs y en Google, aumenta la credibilidad. Las IA reconocen mejor a autores con identidad consolidada.
4. Usá datos estructurados
Implementá schema markup en tu web para que los motores comprendan quién sos, sobre qué escribís y qué autoridad tenés en cada área.
5. Buscá menciones, no solo enlaces
Antes, los backlinks eran el objetivo. Hoy, una mención positiva en una fuente de confianza puede valer más que un enlace si la IA lo detecta.
El SEO no muere. Evoluciona.
Los clics pueden bajar, pero eso no significa que no haya oportunidades. Significa que hay que cambiar la forma de pensar la visibilidad.
Ya no se trata solo de estar primero en Google. Ahora se trata de ser la voz que la IA decide incluir en su respuesta.
Conclusión
Estamos entrando en una nueva etapa. Y como siempre, los que primero se adaptan son los que más crecen.
Si tenés un blog, una marca personal o una empresa, no esperes a que el tráfico baje para reaccionar. Empezá hoy a construir tu reputación digital pensando en la IA.
Porque el futuro no es de quienes saben SEO.
Es de quienes logran ser citados por la inteligencia artificial.